Baloncesto
Mazazo en Bilbao: Hlinason y Jones, bajas
A perro flaco… Hlinason y Jones, los dos pívots del Surne Bilbao Basket, estarán de baja varias semanas a causa de las sendas lesiones musculares con las que acabaron el partido europeo del pasado miércoles frente al Dijon. A falta de conocer el diagnóstico definitivo de ambos jugadores el entrenador del equipo bilbaíno, Jaume Ponsarnau, desveló que los servicios médicos les han avanzado que “en lo más inmediato no contemos con ellos”. “Veremos cuántas semanas”, se resignó. Y lo inmediato es medirse con Tavares, uno de los mejores hombres grandes de Europa. Y luego ir a por la gesta ante el Dijo, ante el que hay que remontar 19 puntos.
Los dos ‘cincos’ de Ponsarnau estarán fuera por lesión varias semanas. Reto mayúsculo ante el Madrid y Tavares.
A perro flaco… Hlinason y Jones, los dos pívots del Surne Bilbao Basket, estarán de baja varias semanas a causa de las sendas lesiones musculares con las que acabaron el partido europeo del pasado miércoles frente al Dijon. A falta de conocer el diagnóstico definitivo de ambos jugadores el entrenador del equipo bilbaíno, Jaume Ponsarnau, desveló que los servicios médicos les han avanzado que “en lo más inmediato no contemos con ellos”. “Veremos cuántas semanas”, se resignó. Y lo inmediato es medirse con Tavares, uno de los mejores hombres grandes de Europa. Y luego ir a por la gesta ante el Dijo, ante el que hay que remontar 19 puntos.
Una vez conozcan los plazos de recuperación de ambos ‘cincos’ el club estudiará la posibilidad de acudir al mercado para “ver si realmente hay buenas opciones temporales para fichar” de cara a este tramo final de la temporada. A corto plazo Ponsarnau adelantó que Sylla “dará un paso hacia el ‘cinco” al igual que el joven Bagayoko y los cuatros De Ridder y Gielo. “Nuestro tipo de defensa lo marca especialmente Hlinason. Amar y Bassala son diferentes, pero vamos a intentar ser también un buen equipo en defensa aprovechando que ellos tienen más movilidad. Y sobre todo encontrar también juego ofensivo. A ver cómo responden los rivales y cómo nos quieren defender. Ahora somos un poquito más imprevisibles y eso pues puede ser una ventaja”, reflexionó.
Además de estas importantes secuelas físicas Ponsarnau admitió que la dolorosa derrota encajada en Francia por una diferencia de 19 puntos que tratarán de remontar el miércoles en Miribilla les ha dejado también “frustración” en el vestuario.
“El equipo está muy frustrado. El compromiso es muy alto y todos nos sentimos inoperantes en algún momento partido. Todas esas cosas que pasaban no supimos llevarlas como tocaba y lo hicimos mal”, admitió el catalán antes de recalcar que afrontan la visita del domingo al Real Madrid con la idea de “hacer el cambio de chip” y “vaciar esa mochila de frustración”.
Ponsarnau reconoció que tienen “poquísimo que perder” en el Movistar Arena frente al equipo “en la línea competitiva más alta de Europa” y que van a tratar de aprovechar la enorme exigencia del rival “para dar ese paso adelante que queremos y necesitamos hacer”. “Uno de los argumentos del partido tiene que ser que no hay presión. La única presión que sí debemos tener es la de intentar hacer las cosas lo mejor posible, alargar las energías y encontrar más jugadores porque últimamente parece que estamos perdiendo jugadores por el camino”, reflexionó.
Sobre la vuelta de la semifinal de la FIBA Europe Cup asume la dificultad de remontar esa diferencia de 19 puntos, pero recordó que “esto es basket y pueden pasar muchas cosas” y recordó los 9 puntos que anotó Chicago Bulls en los últimos 13 segundos para derrotar a Los Ángeles Lakers la pasada madrugada. “Que nadie dude que nosotros vamos a creer que es posible. Lo vamos a intentar con todas nuestras fuerzas, que nadie lo dude”, apostilló
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