Si hay hazaña, Luis Enrique

Se torció la noche para el PSG, que por momentos parecía destinado a sufrir su enésima decepción continental mientras Emery parecía conjugar un nuevo milagro europeo. Y eso que fueron los franceses quienes golpearon primero, en dos ocasiones, para encarrilar su clasificación hacia las semifinales de la Champions League. Olvidaron la madurez y la tenacidad mostrada en la ronda previa frente al Liverpool. Mostraron sus debilidades, pero lograron evitar el descalabro. Jamás perdió la esperanza el equipo inglés, que peleó hasta el final sin encontrar premio a su esfuerzo. Ganó en confianza según progresó el duelo, tiró de orgullo y estuvo cerca de culminar una remontada épica en partido tan eléctrico como impredecible. Noche inmensa en Villa Park, pese a que al remate fueron los visitantes quienes salieron vencedores, pero ofreciendo innumerables dudas.

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 En caso de que el Real Madrid obre la remontada frente al Arsenal, los blancos se medirán a un PSG que terminó pidiendo la hora en Villa Park pese a ponerse con cuatro goles de ventaja en la eliminatoria.  

Se torció la noche para el PSG, que por momentos parecía destinado a sufrir su enésima decepción continental mientras Emery parecía conjugar un nuevo milagro europeo. Y eso que fueron los franceses quienes golpearon primero, en dos ocasiones, para encarrilar su clasificación hacia las semifinales de la Champions League. Olvidaron la madurez y la tenacidad mostrada en la ronda previa frente al Liverpool. Mostraron sus debilidades, pero lograron evitar el descalabro. Jamás perdió la esperanza el equipo inglés, que peleó hasta el final sin encontrar premio a su esfuerzo. Ganó en confianza según progresó el duelo, tiró de orgullo y estuvo cerca de culminar una remontada épica en partido tan eléctrico como impredecible. Noche inmensa en Villa Park, pese a que al remate fueron los visitantes quienes salieron vencedores, pero ofreciendo innumerables dudas.

Salió intenso y directo el Villa. Con ímpetu. Creyó. Incluso cuando el PSG golpeó a las primeras de cambio. Atacaban los de Emery, dejando espacio atrás y permitiendo que Barcola gozase de espacio cuando recibió en el décimo minuto. El francés arrancó por banda izquierda hasta alcanzar el lateral del área, desde donde mandó un centro raso que Martínez quiso interceptar. Salió de su meta, pero cuando palmeó el balón lo dejó en bandeja a Hakimi en el punto de penalti. El lateral llegó desde atrás para, aparentemente, resolver la eliminatoria.

Quiso mantener la concentración el cuadro de Birmingham. Lo intentó. Torres, a la salida de un córner, y Rogers trataron de restablecer la ilusión local en los minutos siguientes. Pero uno se topó con Donnarumma y el otro disparó desviado. Antes de alcanzar la media hora, el PSG volvió a encontrar espacio a la espalda de la zaga local. Dembélé arrancó por la derecha y vio a Mendes en el centro. Con calma, el portugués controló, consideró sus opciones y disparó ajustado para superar a Martínez.

Se apagó el Villa, pero vio nuevamente la luz cuando Kvaratskhelia se lió en el centro del campo. Entonces fueron los villanos quienes encontraron espacio, y quienes combinaron bien en la frontal parisina. Tielemans sacó un disparo que dio en Pacho e hizo inútil la estirada de Martínez. Esperanza restablecida. Creció en el inicio del segundo tiempo cuando McGinn condujo hasta campo contrario y disparó desde lejos. Otro rebote en Pacho permitió a los locales empatar el partido. Se vinieron arriba. Se derrumbaron los visitantes. Empezaron a temblarles las piernas. Rashford penetró en el área dos minutos después y Konsa puso la remontada al abasto del Villa con el 3-2.

Cuando el PSG recuperó el ánimo, el centro del campo desapareció. Se sucedieron las carreras en un toma y daca en el que ambos porteros ganaron protagonismo. Manteniendo a sus respectivos equipos en el partido, y la emoción hasta el final. Nadie logró mover el marcador, para alivio parisino y frustración relativa de los ingleses. Se lamentaron sus jugadores sobre el césped, mostró orgullo su afición en las gradas. Espera el Arsenal en semifinales… o el Real Madrid.

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