Baloncesto
Las bajas, el minuto maldito… las claves de la eliminación del Madrid

El Real Madrid cayó eliminado este jueves en la Euroliga. Los blancos perdieron frente al Olympiacos (84-86) en un final de infarto: Abalde tuvo el triple de la victoria para forzar el quinto partido en El Pireo. Su falló deja al equipo fuera de la Final Four tras enlazar las tres últimas, Belgrado 2022, Kaunas 2023 y Berlín 2024. En la capital lituana, levantó la Undécima.
El equipo blanco dijo este jueves adiós a la Euroliga tras caer en el cuarto partido de su eliminatoria contra el Olympiacos griego.
El Real Madrid cayó eliminado este jueves en la Euroliga. Los blancos perdieron frente al Olympiacos (84-86) en un final de infarto: Abalde tuvo el triple de la victoria para forzar el quinto partido en El Pireo. Su falló deja al equipo fuera de la Final Four tras enlazar las tres últimas, Belgrado 2022, Kaunas 2023 y Berlín 2024. En la capital lituana, levantó la Undécima.
Pero no todo es achacable al error del gallego, existen cuatro claves que explican el adiós prematuro de los blancos de la máxima competición continental.
El alta y las bajas
Antes del cuarto partido de este jueves, se anunció que Evan Fournier regresaría a las canchas después de perderse el tercero por un hematoma en el tobillo. El francés fue el máximo anotador de los suyos con 23 puntos. El alta del escolta vino acompañada por las bajas de Gabriel Deck (cadera izquierda) y Serge Ibaka (rodilla derecha).
Sin el argentino, el Real se quedaba (una vez más) sin un cuatro de garantías, académico. Hezonja tuvo que jugar muchos minutos ahí. También desempeñó esa labor Garuba. Se perdió defensa y profundidad en la rotación.
La ausencia del hispano-congoleño fue más problemática. El pívot está en un gran momento en este tramo de temporada y da descansos de calidad a Tavares. Este jueves, su aportación habría sido más relevante por la acumulación de faltas del caboverdiano, que acabó eliminado, y porque Bruno Fernando aún no garantiza minutos eficientes, sobre todo, en defensa.
Tavares, sus faltas y el arbitraje
Tavares dijo durante esta eliminatoria que siempre acumulaba dos faltas muy rápidas. A veces por su propia culpa, claro; a veces por un criterio arbitral bastante difuso que no ha gustado nada a los madridistas. En este cuarto partido, hubo una macedonia de ambas. Por un lado, acumuló tres faltas muy rápidas y, algunas, muy evitables como la segunda y la tercera, ambas a Milutinov. Y, por el otra, la quinta, tras un bloqueo a Vezenkov, puede ser discutida… pero también venía de una falta no pitada en una lucha por el rebote. La balanza.
De una forma u otra, lo que está claro es que su ausencia condicionó. Menos de diez minutos en la primera parte por sus tres faltas. 16:17 en total antes de ser expulsado para solo 4 puntos. Un problema si añadimos la ausencia de Ibaka.
Su permanencia prolongada en el banquillo permitió a Milutinov atrapar varios rebotes ofensivos y a los atacantes griegos moverse con mayor facilidad cerca del aro madridista. Además, en ataque, el Real perdió una de sus grandes referencias. Un drama.
Triples
La primera parte del Madrid desde el triple fue casi perfecta con un 8 de 14. Un ritmo extraordinario con un lunar: a pesar de ese gran acierto, no lograba poner tierra de por medio con su rival (al descanso, 47-42). Y, para un equipo que es el antepenúltimo de la Euroliga en porcentaje (33,4%), era una mala noticia porque el ritmo iba a caer… como así fue.
Después de los primeros 20 minutos, los de Chus Mateo hicieron un 2 de 10. Un pobre 20% que dio alas al Olympiacos y que limitó las amenazas locales y la remontada. El falló de Abalde en el último segundo, el ejemplo más claro.
El minuto del horror
Del minuto 37 al 38, el Madrid perdió casi todas sus opciones de llevarse el encuentro. Tras un triple errado por Fournier con 78-82, Tavares cometió en un mal bloqueo en ataque sobre Vezenkov su quinta falta. Primera campanada.
La segunda llegó con un falló de Sergio Llull. El balear tuvo una bandeja solo tras un robo para el 80-82. El miedo al tapón de Walkup le hizo no acertar en carrera y en la lucha por el rebote, los blancos cometieron su cuarta falta de equipo.
La tercera fue casi letal. Triple de enorme calidad de Vezenkov para el 80-85 y solo dos minutos por delante. Una daga en las esperanzas de un Madrid que se olvida de su tercer título esta temporada.
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