Baloncesto
El último tren del Madrid
El Real Madrid recibe esta tarde de domingo al Valencia Basket, precisamente el último rival que fue capaz de doblarle en la Liga ACB, allá por el 22 de diciembre. Desde entonces, ha pasado un mundo a cámara lenta por la casa blanca. El Madrid perdió la final de la Copa del Rey ante el Unicaja Málaga, el mismo verdugo que tuvo en la última Supercopa.
El equipo blanco se mide este domingo con el Valencia Basket en la Liga Endesa tras caer eliminado frente al Olympiacos en los cuartos de la Euroliga.
El Real Madrid recibe esta tarde de domingo al Valencia Basket, precisamente el último rival que fue capaz de doblarle en la Liga ACB, allá por el 22 de diciembre. Desde entonces, ha pasado un mundo a cámara lenta por la casa blanca. El Madrid perdió la final de la Copa del Rey ante el Unicaja Málaga, el mismo verdugo que tuvo en la última Supercopa.
Luego agonizó para meterse en el playoff de la Euroliga, al que accedió a través del play in como octavo clasificado tras una derrota ante el París y un triunfo ante el Bayern. Y, por último, sucumbió el pasado jueves en el cruce de cuartos por 3-1 ante el Olympiacos, el mejor de la liga regular, para quedarse fuera de la Final Four por primera vez desde 2021, un periplo en el que pudo cantar la Undécima hace dos años.
El factor cancha es determinante en Europa. Y la diferencia de rendimiento con los helenos no ha sido una casualidad. La irregularidad ha tenido consecuencias fatales. Aun así, los de Chus Mateo compitieron bien frente al potente equipo griego. El Madrid nunca falla en eso.
Los blancos se despiden del torneo continental justo en el momento que mejor nivel han alcanzado, con los fichajes veraniegos al fin acoplados y con el bloque compactado. Su eterno rival, el Barça, tampoco ha campeonado durante este curso, pero tiene una bala más en la Euroliga, el martes ante el Mónaco, para sacar billete a Abu Dabi.
El Madrid regresa así a su bastión, que esta temporada es la Liga. Y a ella se tendrá que agarrar si quiere celebrar algún título este año. Es su último tren. Aunque hasta la fecha viaja en AVE. En ese periodo de más de cuatro meses, en el que han ocurrido todas estas cosas, el equipo merengue también ha enlazado una racha sideral de 17 victorias consecutivas en la liga doméstica. Aquí nadie le tose. De momento. Hoy vuelve herido, pero todavía vivo. Queda una corona en liza. Que no es menor.
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