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David Castro: “Ni en mis peores sueños pensaba que iba a ser un año así”
Todos los componentes del Racing de Ferrol han vivido una temporada de excesivo desgaste. Los resultados negativos que han mermado al equipo a lo largo de la temporada han hecho muy difícil de llevar el trabajo en el día a día de la plantilla. La presión, estar inmersos en un bucle negativo sin fin, ha abierto muchas grietas a lo largo del año de cara al futuro. La ruptura social en los últimos partidos es evidente con A Malata cada vez más vacía, un hecho doloroso después de lo que había vivido el club gallego en los últimos años. David Castro, en su cuarto año vistiendo de verde, analizó lo ocurrido en una campaña para el olvido:
El central del Racing de Ferrol lamenta todo lo ocurrido esta temporada con el equipo, ya descendido matemáticamente a Primera RFEF desde el pasado mes de abril.
Todos los componentes del Racing de Ferrol han vivido una temporada de excesivo desgaste. Los resultados negativos que han mermado al equipo a lo largo de la temporada han hecho muy difícil de llevar el trabajo en el día a día de la plantilla. La presión, estar inmersos en un bucle negativo sin fin, ha abierto muchas grietas a lo largo del año de cara al futuro. La ruptura social en los últimos partidos es evidente con A Malata cada vez más vacía, un hecho doloroso después de lo que había vivido el club gallego en los últimos años. David Castro, en su cuarto año vistiendo de verde, analizó lo ocurrido en una campaña para el olvido:
Semana con derrota: “Qué voy a decir a estas alturas. Es dura la situación, la temporada y las semanas. Es cierto que ahora mismo alivia una victoria, pero la situación haciendo balance se hace muy dura. Nos intentamos levantar al día siguiente, entrenamos lo mejor que se pueda y afrontamos los partidos para intentar seguir compitiendo. Pienso que el equipo a pesar de no estar sacando resultados está compitiendo y no se deja ir. En el campo del Almería al final acabamos metiéndolos atrás, esta semana con el Zaragoza igual, pero es cierto que no estamos sacando resultados. Al menos que el equipo compita”.
Ganas de finalizar la temporada: “Al final somos deportistas y en el fútbol a veces pasa esto. La verdad es que ni en mis peores sueños pensaba que iba a ser un año así. Tenemos que afrontarlo como viene, primero intentando que no suceda y si sucede contar con esa realidad. Tenemos que venir a entrenar, saltar al campo y hacerlo lo mejor posible. No es la situación idónea para competir, pero tenemos que ser profesionales y dar la cara hasta el final”.
Descendidos: “Somos una de las víctimas y al final no podemos pensar en la situación de nuestros rivales. Bastante tenemos con lo nuestro. Da igual que juguemos con un equipo que esté en descenso, media tabla o en la parte de arriba. Tenemos que pensar en lo nuestro, hacer el mejor partido y dar la mejor imagen por el club y afición”.
Disculpas a la afición: “Tienen que estar muy descontentos. Les quiero pedir perdón y asumir la responsabilidad que me toca por esa parte. Tenemos que terminar de la mejor forma por el club, afición y por la ciudad”.
Mantener la motivación: “Tiramos de la profesionalidad. A mí lo que duele es ver desde que estoy aquí un crecimiento y cómo la ciudad con el club ha ido creciendo y me dolería mucho salir ahí para no dar todo lo que tengo. Esa sensación no me la perdonaría nunca. Esto es algo que me ayuda a trabajar en el día a día y a seguir compitiendo en los partidos. Para mí esto es básico”.
Fin a su contrato: “Termino contrato este año. Renové hace dos años sin saber en la categoría en la que íbamos a jugar cuando estábamos en Primera RFEF. Ahora acabo contrato y lo que haré es sentarme con el club, sin duda. Cuando ellos estimen oportuno hablaremos y que sea lo mejor para todos. En el Racing llevo cuatro años y le tengo un cariño especial. Más allá de lo deportivo, en lo personal ver crecer al club, ver crecer la ciudad, esto va más allá de lo estrictamente profesional. Nos sentaremos, hablaremos y miraremos lo que es mejor”.
Desgaste a lo largo del año: “Al final para tomar una decisión se pone todo en la balanza. Tanto lo racional, emocional, desgaste y lo que llevo vivido aquí durante cuatro años. Tanto para el club como para todo el mundo. Fue un año de desgaste, está claro. Incluso el año pasado terminó siendo de desgaste y eso lo hablé con Carlos el pasado verano. Pensaba que las cosas iban a ser un poco diferentes al llegar al fútbol profesional, pero de este año estás tan metido dentro, poniendo todo encima de la mesa lo que ha pasado, con mi enfermedad con la que estuve ingresado, no me paré a pensar realmente todo lo que pasó esta temporada. Tendrá su lugar ese desgaste, pero tampoco creo que sea algo diferencial porque cada año en el fútbol es muy diferente. No tiene nada que ver lo que pasó hace dos o tres años con lo que fue el año pasado y este año. Incluso en años que parecen bonitos, igual hay más desgaste y en años que son fastidiados hay desgaste, pero a veces a lo mejor todo no es cómo se ve desde fuera”.
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