Deportes
Otra final en el río revuelto

El fútbol es un deporte que invita a conjugar verbos románticos. Soñar es el más evocador. Pero en los sueños (como en el fútbol) se esconden también las pesadillas. Bipolaridad en la que anda zambullido desde hace varias jornadas este Leganés de UVI perpetua, con más de medio cuerpo abrasado por el cercano calor del infierno y el resto del alma apuntando a la esperanza aritmética de la salvación. Los pepineros, que hoy se miden al Espanyol (14:00, sigue el partido en directo en AS.com) sobreviven a cuatro puntos de la permanencia. El reloj corre. Y eso juega a favor del pánico.
El Leganés debe ganar para mantener la esperanza de una salvación que el Espanyol lograría con una victoria. Las vías de agua se le multiplican al Lega: ayer Borja admitió que no cree que el club quiera que siga.
El fútbol es un deporte que invita a conjugar verbos románticos. Soñar es el más evocador. Pero en los sueños (como en el fútbol) se esconden también las pesadillas. Bipolaridad en la que anda zambullido desde hace varias jornadas este Leganés de UVI perpetua, con más de medio cuerpo abrasado por el cercano calor del infierno y el resto del alma apuntando a la esperanza aritmética de la salvación. Los pepineros, que hoy se miden al Espanyol (14:00, sigue el partido en directo en AS.com) sobreviven a cuatro puntos de la permanencia. El reloj corre. Y eso juega a favor del pánico.
También la descomposición de un proyecto con, cada vez, más vías de agua abiertas. En lo institucional y, ahora, también en lo deportivo. Ayer su entrenador, Borja Jiménez, admitió que no cree que siga el curso que viene porque el club no parece contar con él. Y entretanto, desliza que hay jugadores ya desconectados para los que piensa aplicar la receta del banquillo o la grada. Medicina que se podría pensar que motivó la ausencia en Sevilla de Miguel, héroe del ascenso. Borja dice que fue “por motivos relacionados con el juego”. Confusión.
Matemática y esperanza
Y aun así, el Lega cree porque su plantilla destila una resiliencia como pocas en su historia. Ganar hoy al Espanyol sería una bocanada de fe para insistir en el milagro de sus cuentas: con 9 puntos de 12, dicen en Butarque, habrá salvación. Los pericos la lograrían matemática de ganar hoy, aunque virtualmente se da casi por sellada a lomos de Joan García y sus estiradas, Roberto Fernández y sus goles (lleva seis desde que fichó en enero) y Manolo González y una pizarra milagrosa.
Sin Omar, sancionado, Tejero apunta a su reemplazo. En el Lega, Borja Jiménez deberá inventar algo para el lateral zurdo. Javi Hernández, su única opción ahí, está sancionado. Neyou, Nastasic y Miguel apuntan al banquillo de esta final en Butarque, la enésima en este río revuelto.
¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí