Probamos el nuevo Hyundai Inster: eres grande, pequeño

Este eléctrico, uno de los más pequeños del mercado, sorprende por la calidad de rodadura, el espacio trasero y el equipamiento. Tiene entre 300 y 350 km de alcance real. Si encima fuese más barato… Leer 

Primera consideración: el Hyundai Inster no le servirá para viajes largos del tirón, ni es un coche familiar por su espacio. Y solo tiene cuatro plazas (aunque muy grandes). Pero si esos requisitos no están entre sus prioridades y busca un eléctrico pequeño -mide solo 3,83 metros-nos parece la mejor opción.

Claro que eso se paga: si opta a la versión más prestacional y (muy bien) equipada, la factura se puede ir, sin posibles ayudas públicas, a 31.600 euros. Aunque también lo hay por 24.990 euros, sin renuncias drásticas más allá de menos potencia (de 115 baja a 97 CV), algunos kms de autonomía (327 km en lugar de 370); una batería más pequeña (42 kWh frente a 49) y algunos equipamientos no fundamentales. Si acaso, que los asientos posteriores ya no se pueden deslizar. Sus rivales obvios son el Dacia Spring o el Leapmotor T03.

Segundo aspecto a valorar: la estética. Es algo siempre subjetivo, más en coches que polarizan las opiniones. A nosotros nos gusta, nos parece simpático, aunque ser tan estrecho (solo 1,61 m) le da aspecto de minicoche, como los kei car japoneses. En parte, ese diseño -que aporta grandes ventajas en ciudad o al aparcar- se explica en su interior, que nada tiene que envidiar a modelos de Hyundai mucho más ambiciosos.

De hecho, el puesto de conducción, por los mandos o el cuadro de instrumentos y la pantalla central multimedia (ambas de 10,25 pulgadas), nos traen a la mente los eléctricos Ioniq, varias categorías por encima. En este sentido, la calidad de los plásticos o los ajustes tampoco desmerecen. Y los asientos delanteros, en la versión probada, estaban ‘unidos’, dejando entre ellos dos huecos portabebidas.

Pero lo espectacular está detrás. Las dos plazas son amplias y se pueden deslizar (de forma independiente) hacia adelante o atrás hasta 16 cm, lo que permite contar con un espacio para las piernas propio de una berlina de representación. Y en cuanto al hueco para la cabeza, más de lo mismo: hay que ser muy grande para rozar con la cabeza en el techo. Por ultimo, esas plazas también se pueden reclinar y abatir por completo. Y lo mismo con las delanteras, lo que permite montarse una pequeña cama donde descansar.

El maletero, que cuenta con un piso a doble altura, es pequeño (280 litros), como el Inster, pero se puede llegar a los 320 litros llevando los asientos traseros adelante del todo. Y si los abatimos, nos encontramos con una pequeña furgoneta. También hay suficientes huecos, algunos muy pequeños, para dejar objetos.

La calidad de rodadura es de nota. A alta velocidad aparece algún ruido molesto y el perfil de los neumáticos (45 sobre llanta 17) le quita algo de confort; pero el coche tiene la pisada de un modelo de superior categoría y se mantiene bastante estable a pesar de lo alto que es. No es que invite a correr (la punta es de 150 km/h) pero cuando lo hacemos, transmite una confianza enorme. Además, es muy fácil conseguir una posición óptima al volante.

En cuanto al consumo, durante nuestra semana de prueba clavamos el oficial homologado: 15 kWh cada 100 km que se traducen en unos 360 reales de autonomía combinando ciudad, circunvalaciones y autovía. Aunque yendo suave, se puede bajar a los 12 kWh cada 100 km. En un viaje exclusivamente en carretera, a velocidades legales y sin tener que pasar frio o calor, rondar los 300 km reales no parece una quimera.

También por lo que ayuda el sistema de regeneración de la frenada, que funciona a modo de caja de cambios con levas tras el volante y cuenta con cuatro modos de recuperación. Uno de ellos es el one-pedal. Si toca rellenar la batería, la potencia máxima es de 85 kW en un poste rápido. Más que de sobra para el uso mayoritario que se le va a dar al vehículo. Es decir, ciudad y alrededores. Incluso en la versión Cross, que cuenta con detalles y diseño más camperos, pero no ofrece un extra dinámico en este sentido. Cuesta 31.700 euros.