Deporte Motor
“No imagino una entrada en meta de mis hijos codo con codo”
Roser Alentà, la mamá de los Márquez, regresaba del podio de MotoGP a la zona de boxes felicísima por ver a sus dos hijos por tercera vez ocupando el primer y el segundo puesto de la clase reina, y llevaba en la mano el polo rojo del equipo oficial Ducati que le había entregado el propio Marc en el parque cerrado. Roser atendió a AS con la simpatía que le caracteriza tras la carrera de MotoGP en Aragón y, entre otras cosas, dejaba claro que no quiere verles entrar en la meta pegándose codo con codo, como hicieron Öncü y Moreira en la carrera de Moto2.
Roser Alentà, la mamá de los Márquez: “Si hacen eso, en casa no entran y no les hago más macarrones”.
Roser Alentà, la mamá de los Márquez, regresaba del podio de MotoGP a la zona de boxes felicísima por ver a sus dos hijos por tercera vez ocupando el primer y el segundo puesto de la clase reina, y llevaba en la mano el polo rojo del equipo oficial Ducati que le había entregado el propio Marc en el parque cerrado. Roser atendió a AS con la simpatía que le caracteriza tras la carrera de MotoGP en Aragón y, entre otras cosas, dejaba claro que no quiere verles entrar en la meta pegándose codo con codo, como hicieron Öncü y Moreira en la carrera de Moto2.
“No me imagino que se les ocurra entrar así un día en meta, porque en casa no entran y no les hago más macarrones. Para mí lo importante es que los dos están felices. Estaría bonito es que los dos se alternasen ganando. Es broma. En serio digo que Marc gane y que haga lo suyo, que se lo merece. Fuera de coñas, Marc se lo merece después de tantos años de sufrimiento como ha vivido. Y ya llegará el momento de Álex. Los dos tienen a su madre en un pedestal y me cuidan muy bien. He sufrido mucho, pero ahora toca disfrutar”, decía combinando tono de broma y de seriedad.
Respecto a con quién de sus dos hijos iba en la carrera de Alcañiz, ganada por Marc y con Álex segundo: “Iba con los dos, pero al acabar el podio han venido los de Ducati, me han dado la camiseta roja y no la podía despreciar, que también es mi hijo”.
Y dejaba claro que tiene cariño de sobra para ambos: “Yo quiero a los dos por igual. Uno tiene unas cosas y el otro tiene otras, pero eso queda en familia. Cada uno tiene un corazón diferente, pero los dos tienen un buen corazón. Y como pilotos, bien. Hacen algo que les gusta. Disfrutan encima de la moto y qué mejor que trabajar en lo que les gusta”.
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