Baloncesto
La gloria en siete puntos
Mañana puede ser un día para la eternidad en Bilbao. El Surne defiende en el caliente Palataki de Salónica (19:15 horas, ETB-1) los siete puntos de ventaja alcanzados hace una semana en Miribilla (72-65) para lograr ante el PAOK el que sería el primer titulo europeo de su historia, que sería la FIBA Europe Cup. Ponsarnau ha resaltado estos días que no conviene desdeñar los de LEB-2 y LEB, así como la Copa LEB-2, pero, evidentemente, estos entorchados son bastante menores. Algunos también tratan de restar brillo a esta cuarta competición europea, pero es la que corresponde a un club modesto como el Bilbao Basket y abrir las vitrinas con algo así sería memorable.
El Bilbao Basket defiende esa renta en la cancha caliente del PAOK para anotarse el primer título de su historia, la FIBA Europe Cup. Ponsarnau propone pensar que van empatados.
Mañana puede ser un día para la eternidad en Bilbao. El Surne defiende en el caliente Palataki de Salónica (19:15 horas, ETB-1) los siete puntos de ventaja alcanzados hace una semana en Miribilla (72-65) para lograr ante el PAOK el que sería el primer titulo europeo de su historia, que sería la FIBA Europe Cup. Ponsarnau ha resaltado estos días que no conviene desdeñar los de LEB-2 y LEB, así como la Copa LEB-2, pero, evidentemente, estos entorchados son bastante menores. Algunos también tratan de restar brillo a esta cuarta competición europea, pero es la que corresponde a un club modesto como el Bilbao Basket y abrir las vitrinas con algo así sería memorable.
Es la segunda vez que el conjunto vizcaíno llega a la ronda definitiva de un torneo europeo tras haberlo hecho también en la Eurocup en 2013. Pero entonces, a un partido, cayó derrotado en la localidad belga de Charleroi por el Lokomotiv Kuban ruso por 64-75. También cayó en una final ACB ante el Barça. En esta ocasión la cita es a doble encuentro y al terminar el primero los más de 10.000 aficionados que abarrotaron el Bilbao Arena se preguntaban al final si esos siete puntos de diferencia eran muchos, pocos o ni una cosa ni la otra.
Pero es un botín apreciable y obligan a remontar a un rival que por un momento creyó en la capital vizcaína que podía haber dejado decantada la eliminatoria. Fue cuando se adelantó 44-48 bien avanzado el tercer cuarto con una canasta de Katsivelis, uno de los jugadores claves del PAOK. En el conjunto que dirige el italiano Cancellieri, con una rotación principal de Katsivelis y seis americanos, los mejores hace una semana fueron los exteriores Bartley (14, 5 rebotes y 17) y Reynolds (15), las estrellas del equipo, y el buen inicio de Henderson Jr (11 y 8 rebotes). En la zona fueron los interiores visitantes los que dominaron el rebote (38-44), sobre todo en el apartado ofensivo (8-14), aunque con el paso de los minutos fue una faceta en la que se fueron igualando las cosas.
La expedición bilbaína se desplazó a Salónica en un vuelo chárter ocupado por unas 140 personas, incluidos periodistas acreditados y un pequeño grupo de aficionados de los alrededor de 150 que se espera que arropen al conjunto bilbaíno en las gradas del PAOK Arena. La nave que iba a trasladarles sufrió una avería y en lugar de partir a las 14:00 horas lo hizo a las 15:30. A nivel institucional, la delegación está encabezada por la presidenta, Isabel Iturbe, y formada además por consejeros y personal del club. Ponsarnau ha desplazado a los 16 jugadores que han intervenido en la competición, los 14 de la primera plantilla y los jóvenes Chacón y Taboada.
El técnico catalán aseguró antes de emprender el viaje que médicamente está casi todo el mundo disponible y no descartó para la convocatoria final de 12 a ninguno de los tres que presentan algún problema físico: Hlinason, Cazalon y el capitán, Rabaseda, que ha sufrido una meningitis. “Incluso tenemos un día más para acabar de recuperar a alguien. Vamos a intentar buscar a los jugadores que están más en forma, con mejores sensaciones y que pueden aportar más cosas. Nos quedan unas cuantas horas para decidir”, explicó. Admitió que el Palataki es una pista en llamas a nivel ambiental, pero recalcó que lo que verdaderamente le preocupa es lo que pase entre las cuatro líneas. “Vamos a jugar a un sitio con una tradición muy forjada de un ser un sitio caliente y con una afición muy caliente, pero a nosotros nos preocupan sobre todo las virtudes de PAOK. Han llegado a la final por méritos propios y ha tenido además muchos días para preparar ese partido”, subrayó en alusión al descanso en el torneo heleno el fin de semana. “Cuanto más ambiente, más motivante. Tenemos que buscar que el ambiente que nos podamos encontrar sea un reto de motivación. Vamos que tener que estar muy despejados, abiertos y leer y aprender en cada momento durante el partido”, reflexionó el técnico.
En ese sentido, el estratega de Tàrrega aseguró que los siete puntos de ventaja con los que afrontan la vuelta de la final “son casi como un empate” porque esa renta “se puede remontar en 15 segundos”. “Vamos a pensar que el partido está casi empatado y a competir dando nuestro cien por cien en cada posesión, como intentamos hacer en el primer partido. Este es un partido de 80 minutos que así lo requiere”, finalizó.
