Deportes
La otra cara del Clásico
Este domingo se disputa el partido del año. Barcelona y Real Madrid se enfrentan en un choque que seguramente decida LaLiga. Cuatro puntos de distancia hay entre uno y otro equipo a falta de cuatro jornadas. Un partido de alto riesgo que obliga a un gran despliegue policial y de coordinación entre los directivos de seguridad de LaLiga, Barcelona y Real Madrid. La transcendencia del partido no se queda ahí, ya que el despliegue televisivo contará con más de 500 personas para que sea una retransmisión que cabalgue entre el cine y el videojuego.
Más de 500 técnicos participarán en la retransmisión, que contará con ópticas de cine y el doble de cámaras de lo normal. Unos 500 policías velarán por la seguridad.
Este domingo se disputa el partido del año. Barcelona y Real Madrid se enfrentan en un choque que seguramente decida LaLiga. Cuatro puntos de distancia hay entre uno y otro equipo a falta de cuatro jornadas. Un partido de alto riesgo que obliga a un gran despliegue policial y de coordinación entre los directivos de seguridad de LaLiga, Barcelona y Real Madrid. La transcendencia del partido no se queda ahí, ya que el despliegue televisivo contará con más de 500 personas para que sea una retransmisión que cabalgue entre el cine y el videojuego.
LaLiga lleva varios años emprendiendo una dura cruzada contra los violentos en el fútbol español. Y el Clásico es uno de los partidos más delicados, siendo calificado por la Comisión Antiviolencia de alto riesgo. “El dispositivo de un Clásico es como el de un partido normal, pero todo incrementado”, apuntan desde la dirección de seguridad de LaLiga.
El dispositivo no es cosa de un día, sino que conlleva un gran trabajo por detrás: “Nuestro trabajo empieza desde mucho antes, tenemos que saber cuántos aficionados se desplazan y cuál es su perfil, dónde se alojan los equipos…”. Y añaden: “El director de seguridad del Real Madrid está obligado a transmitir información al del Barcelona desde una semana antes. Deberá ir con los aficionados porque sabe cuáles son las conflictivos”.
Esta temporada está siendo ejemplarizante. Según los datos de LaLiga, solo se ha producido una pelea entre grupos violentos en los prolegómenos de un encuentro liguero, fue en el Córdoba-Almería. El dato más bajo desde 2015, desde que se cuantifica este tipo de incidentes.
Para que la inercia de buen comportamiento entre aficiones no se trastoque en este partido que se verá desde todo el mundo, los Mossos D’Esquadra también han redoblado esfuerzos: “Es un evento muy complejo, pero no podemos dejar nada a la improvisación. Todo lo previsible tiene que estar previsto. Tenemos a un equipo con muchas tablas y experiencia para ello”.
Los Mossos estarán pendientes de todo el dispositivo, hasta de que no se cuelen aficionados del equipo rival: “Si un aficionado aparece con la camiseta del Madrid en la zona del Barcelona o al revés puede generar un problema. Tenemos que vigilarlo. Si se detecta, hay que reubicarlos. No es conveniente en un partido de alto riesgo dejar elementos que nos puede generar problemas. Hay que gestionarlo amablemente”. Y prosiguen: “El alto riesgo conlleva que tenemos más policías y más seguridad, pero también que se hagan cacheos e identificaciones más rigurosas y exhaustivas”. Además, han pedido restringir el espacio aéreo sobre Montjuic para evitar la presencia de drones.
Sobre la preocupación del desplazamiento de Ultra Sur, los Mossos explicaron el trabajo que están realizando: “No nos consta el desplazamiento de aficionados radicales. De ninguno de los equipos. Pero el dispositivo debe prever lo imprevisto. Nuestra información ahora mismo es que no se van a trasladar”. A lo que añaden desde LaLiga: “Los Ultras solo se desplazan en partido de Champions, donde no se aplica nuestra ley. Aquí hay unos controles que no existen en otros lados. Si sacan una bengala en España te van a identificar. UEFA sanciona a los clubes, no a las personas”.
Una retransmisión de cine y videojuego
El mundo entero estará pendiente del Clásico y la retransmisión debe estar a la altura. La consigna de LaLiga es clara y por ello se realizará un despliegue descomunal. Más de 500 trabajadores participarán en este aspecto durante la previa, el partido y el post. Se contará con 40 cámaras durante la retransmisión, el doble de lo habitual en un partido de LaLiga.
Habrá dos unidades móviles desde las que se coordinará una cobertura que se adentrará en todos los rincones. Desde el túnel de vestuarios hasta la salida de los hoteles. Para ello, se ha habilitado un equipo de televisión en dos motocicletas para cubrir el desplazamiento de los equipos y el recibimiento de los aficionados. Además, se contará con la spider cam, para dar una vista aérea del partido, ocho cámaras lenta y cuatro con ópticas de cine.
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