Baloncesto
“A la NBA puedes ir con la familia; la Euroliga es una zona de guerra”
El flamante MVP de la Euroliga, Kendrick Nunn, estrenó su galardón ayer en la victoria del Panathinaikos ante el Anadolu Efes en el primer partido de cuartos de final. El americano no fue esta vez el mejor jugador de los suyos (15 puntos, 1/5 en tiros de 2, 3/10 en triples). El protagonismo recayó en otros compañeros como Kostas Sloukas, Omer Yurtseven y, sobre todo, un Juancho Hernangómez estelar, que batió el récord del equipo heleno de rebotes (16) y valoración (40) en un partido de playoff.
Kendrick Nunn habla de las diferencia entre las dos competiciones y por qué se ha adaptado tan bien a la Euroliga: “Soy una persona competitiva”.
El flamante MVP de la Euroliga, Kendrick Nunn, estrenó su galardón ayer en la victoria del Panathinaikos ante el Anadolu Efes en el primer partido de cuartos de final. El americano no fue esta vez el mejor jugador de los suyos (15 puntos, 1/5 en tiros de 2, 3/10 en triples). El protagonismo recayó en otros compañeros como Kostas Sloukas, Omer Yurtseven y, sobre todo, un Juancho Hernangómez estelar, que batió el récord del equipo heleno de rebotes (16) y valoración (40) en un partido de playoff.
Unas horas antes del encuentro, y con su trofeo de MVP en la mano, participó en el podcast Euroleague & Friends para hablar de su gran temporada y de otros temas. Entre otras cosas le preguntaron por una cuestión de la que cada vez opinan más jugadores que han estado a los dos lados del Atlántico: la diferencia entre la NBA y la Euroliga. La mayoría suelen destacar que la competición europea es más dura, más intensa, y Nunn está de acuerdo con esa apreciación. Así cuenta que se lo explica a otros compatriotas que le preguntan por cómo es jugar en Europa:
“Les digo que es un juego diferente, totalmente diferente. Les digo que es una zona de guerra en términos de baloncesto. Cuando vas a un partido de la NBA es más entretenimiento. Vienes a verlo, llevas a amigos y familiares al partido, cosas así. Es un espectáculo. Los espectáculos del medio tiempo son increíbles, pero aquí se trata más de la competencia. Se trata más de la pasión y de intentar ganar el partido, así que lo disfruto más así. Soy competitivo, creo que me va perfecto”.
Nunn es ya uno de los grandes jugadores estadounidenses en la historia de la Euroliga y el más determinante ahora mismo, pero ni mucho menos ha sido quien ha inaugurado el camino. De entre todos los anteriores, su referente principal es Shane Larkin, al que precisamente se está enfrentando en la eliminatoria ante el Efes: “Cuando estaba en la NBA veía lo que Shane hacía aquí y pensaba: ‘Bueno, ahí hay una oportunidad y una posibilidad’. Él es un estadounidense que llegó a Europa y tuvo éxito y un par de años después llegué yo para seguirlo. Creo que empezó con Shane y ahora yo llevo la antorcha. He hablado con muchos jugadores estadounidenses que han venido este año y los he convencido. Con el paso de los años, sin duda verán venir a más estadounidenses”.
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