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Historia del fútbol mundial: el momento en el que un brasileño entra en el Libro Guinness de los récords
La jugada se produjo en un momento en el que el Famalicão lo ponía todo en el área azurra y, después de que la defensa de los rojos lograse despejar, Gabriel Silva intentó aprovechar que el portero rival no estaba en su portería. Allí disparó a altísima velocidad, alcanzando los citados 40,3 kilómetros por hora, debidamente registrados en su GPS.
El jugador de Santa Clara, con 40,3 kilómetros por hora confirmados por los datos GPS de STATSPorts, batió en el último partido ante Famalicão el récord de velocidad de un futbolista hasta la fecha.
La jugada se produjo en un momento en el que el Famalicão lo ponía todo en el área azurra y, después de que la defensa de los rojos lograse despejar, Gabriel Silva intentó aprovechar que el portero rival no estaba en su portería. Allí disparó a altísima velocidad, alcanzando los citados 40,3 kilómetros por hora, debidamente registrados en su GPS.
Ahora bien, los datos estadísticos son diversos y hay varias recopilaciones, teniendo en cuenta si la velocidad se alcanza con o sin balón, por ejemplo, pero hay un hecho indiscutible: Gabriel Silva alcanzó la marca más rápida confirmada por GPS.
Hasta ahora, Sven Botman había encabezado la lista, con 39,21 km/h. El central del Newcastle ve ahora superado su récord por el jugador de Santa Clara, que a sus 23 años se ha hecho un nombre con el escudo de las Azores en el pecho.
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