Deporte Motor
“Un Mercedes lento a morir”
El año nuevo no ha llegado con problemas nuevos para Mercedes. En Brackley cambiaron su alineación con la llegada de Andrea Kimi Antonelli, pero esa fue la única variación en la fábrica británica sobre el asfalto. Porque el W16 sigue compartiendo debilidades con su antecesor y a pesar de que ocupan la segunda posición de la general (la regularidad les alza frente a Red Bull), la regularidad en la zona media está siendo su gran baza. Ya que en varios grandes premios, como sucedió en Ímola, los resultados han llegado más por errores del contrario que por rendimiento propio.
Russell no achaca el pobre resultado de Ímola a la mala suerte y señala las deficiencias a un problema del pasado: “Cuando hace calor somos lentos y cuando hace frío, rápidos”.
El año nuevo no ha llegado con problemas nuevos para Mercedes. En Brackley cambiaron su alineación con la llegada de Andrea Kimi Antonelli, pero esa fue la única variación en la fábrica británica sobre el asfalto. Porque el W16 sigue compartiendo debilidades con su antecesor y a pesar de que ocupan la segunda posición de la general (la regularidad les alza frente a Red Bull), la regularidad en la zona media está siendo su gran baza. Ya que en varios grandes premios, como sucedió en Ímola, los resultados han llegado más por errores del contrario que por rendimiento propio.
Williams falló en la estrategia y eso alzó a un Mercedes que cruzó meta con George Russell en la séptima posición. El W16 de Antonelli tuvo que abandonar la carrera en un domingo donde el monoplaza de Brackley luchó contra las altas temperaturas. Ya que, como señaló el piloto británico en Sky Sports, las deficiencias sobre el asfalto son consecuencia de ese problema que arrastran desde el pasado: “Las tendencias son bastante claras: cuando hace calor somos lentos, cuando hace frío somos rápidos, y eso ya pasaba el año pasado. Hemos intentado de todo con la configuración para encontrar soluciones, pero claramente hay algo más fundamental en el coche”.
Russell no habla de infortunios en sus resultados junto al W16 y señala directamente al monoplaza: “No, definitivamente no fue mala suerte. Simplemente, fuimos lentos a morir”. El británico no cae en excusas y señala directamente a Mercedes: “No es la primera carrera del año en la que somos más lentos que Ferrari, e incluso más lentos que Williams o vamos al mismo ritmo que ellos. Pero de alguna forma hemos conseguido salvar los muebles en esas ocasiones. Pero hoy, sinceramente, tuvimos mucha suerte de acabar séptimos”.
“Pensé que algo iba mal”
El calor está siendo un quebradero de cabeza en Brackley e Ímola lo puso de nuevo en relieve… desde la vuelta de formación. “Fue muy extraño. En las vueltas a la parrilla ya estaba informando de problemas con el coche y pensé que algo iba mal. El equipo revisó todo y no vio nada, pero esa sensación continuó durante unas 60 vueltas”, explicaba Russell, sobre el momento en el que identificó una debilidad que le lastró durante todo el gran premio.
Desde el muro de Merecedes no fueron capaces de identificar la causa que hacía a Russell sentirse incómodo con el coche. Pero el paso de las vueltas dejó en evidencia cómo en Brackley no han resuelto los problemas del pasado. Y el piloto británico hace hincapié en ello: «Tenemos un problema de base, porque o se sobrecalientan los neumáticos delanteros o los traseros, dependiendo del circuito. Pero no es la primera vez que lo reportamos. Lo que pasa es que probablemente hoy todos nuestros rivales hicieron una carrera medio decente».